Moyano y Filo es mi peluquería desde hace más de 30 años, nunca me han fallado, siempre me han sorprendido, aman su profesión y nunca dejan de innovar y evolucionar, siempre para mejor.
Acudir a Moyano es una inyección de ánimo y felicidad, me siento como en casa de unos buenos amigos, no sólo me arreglan el pelo, me dan amor, empatía y alegría.
Los mejores profesionales y unas maravillosas personas. No tengo palabras para tanto que me dan.